Por Raúl Germán B.
@raulredaccion
Santo
Domingo Oeste.- Enmanuel Bautista era un jovencito hijo
de dos personas muy conocidas en San Miguel: Natalia y Kikito.
De hecho, uno de los centros de
diversión de referencia en San Miguel, en la esquina de la calle Abréu, es el
billar de Kikito.
Enmanuel ya se había enrolado en la
Policía Nacional hace un tiempo y, como todo joven del barrio, le fascinaba
andar en motores.
Y, justamente, en la madrugada del
sábado 15, frente al club de la Superintendencia de Bancos, en Bienvenido,
Enmanuel protagonizó un accidente que le segó la vida a él y otros dos más y
dejó otras dos personas gravemente heridas.
Hoy, todo el pueblo de San Miguel está
de luto por esta irreparable pérdida. ¡Paz a sus restos!
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