Por Martha Castro Arias*
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| Martha Castro Arias. |
Santo
Domingo.- La época de Navidad y Año Nuevo, para muchas
personas, suele ser muy agradable y la más esperada en todo el año.
Basta con decorar el árbol, comprar los
regalos y degustar la cena navideña para sentir ese ambiente fraterno entre las
familias, no solo porque se reúnen los tíos, primos y hermanos, sino, también,
porque se fortalecen los lazos de amor y amistad.
Sin embargo, existen otras personas que
no disfrutan de estos días y, como al estilo de la película infantil “El Grinch”,
desean escapar del frenesí navideño.
Pero no hay quién se escape de estas
festividades, a menos que te escondas en una cueva o te vayas a una isla
desierta, lo que es un imposible.
Las personas que detestan o intentan
ignorar la Navidad tienen un motivo que trastoca su vida personal. En muchos
casos han perdido un familiar en esta época o, simplemente, anhelan estar con
esa persona que falleció. Otros, por el contrario, se sienten solos, porque no
están con la persona deseada, pero también el hecho que se realizan muchos
gastos para los preparativos de la cena navideña, es suficiente para que una
persona sienta presión, explica el psicólogo César Briones Mendieta.
Cualquiera que sea la razón, es una
actitud que puede repararse. Basta con que te lo propongas. Evita seguir
relacionando ese hecho que marcó tu vida con esta temporada navideña. En el
caso de que sientas que no puedas superarlo, lo mejor es que busques ayuda
profesional, y ten por seguro que después de un proceso terapéutico disfrutarás
al igual que todos esta época.
Disfruta.-
Intenta cambiar de actitud y trata de
plantear temas de interés general sobre los que todos puedan opinar, sin que
nadie se sienta excluido ni se aburra. Por otro lado, en vez de amargarte con
la infinidad de complicaciones que se producen durante las fiestas mejor ríete,
recomienda Mendieta.
Nuevas
experiencias.-
Además de conocer gente, quedan muchos
libros por leer, lugares que visitar, aventuras que vivir y experiencias que
probar. La rutina y el aburrimiento suelen conducir al desgano y a la
depresión. Recuerda que solo las cosas que no conoces pueden depararte
satisfacciones insospechadas. No recurras siempre al mismo menú.
Estudios.-
Un estudio canadiense de la Universidad
de British Columbia revela que estar en presencia de un árbol de Navidad afecta
negativamente el estado de ánimo de personas que no celebran la Navidad o
profesan una religión diferente al cristianismo. Los voluntarios que no
celebraban la Navidad mostraron estados de ánimo más negativos.
*Martha Castro Arias es psicóloga
clínica.
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