Por La Redacción
Santo
Domingo.- La Universidad del Caribe, desde el año 1995,
desarrolla proyectos y programas que responden al concepto de Responsabilidad
Social Corporativa.
Su política en este sentido se orienta a
mejorar la calidad de vida de la población más necesitada. Esta labor humanista
la impulsa un equipo comprometido con la capacitación.
La Institución cuyo lema es “La
oportunidad que tú esperabas”, ejecuta un Programa de Becas que beneficia a
2,639 estudiantes de escasos recursos económicos, estimulándolos a mantener un
buen rendimiento académico, incorporándolos además, a las actividades
deportivas, artísticas y culturales.
Becados
en condiciones especiales (discapacitados).-
En esencia, como parte de los proyectos
de Responsabilidad Social Corporativa, atiende el nivel de exclusión de las
personas con condiciones especiales y les proporciona de manera gratuita una
educación superior de calidad, acceso a la tecnología y la motivación para su
desarrollo profesional y personal, que les permitirá ocupar puestos de trabajo
en el mercado laboral.
UNICARIBE dispone de los espacios
infraestructurales adecuados para que estudiantes, docentes y personal administrativo,
que poseen condiciones especiales, puedan movilizarse con facilidad en las
diferentes áreas; además de laboratorios de informática y en la biblioteca se
cuenta con el Sistema Braille (sistema de lectura y escritura táctil para
personas no videntes), para facilitarles el proceso de aprendizaje y el acceso
a la tecnología.
Las personas con condiciones especiales,
que estudian en UNICARIBE, muestran un gran deseo de superación y reflejan una
conducta digna de imitar; con su empeño de romper esa brecha que limita su
desarrollo profesional.
Un
sueño hecho realidad.-
Como si se tratase de un sueño hecho
realidad, la institución académica, con su programa de becas, ha significado
una oportunidad de superación, desarrollo personal y profesional, principalmente
para los que menos oportunidades tienen, como son los casos de:
Awilda Berenice Melo, posee una
condición especial físico-motor, es estudiante de la carrera de Mercadeo, vive
en Santo Domingo Oeste, ejemplo y portavoz al mundo, de que UNICARIBE tiene
como esencia la humanización del servicio, sin distinción.
Berenice Melo expresó: “me informé de
los servicios que ofrece UNICARIBE a personas en condiciones especiales, a
través de una amiga que conocía mis inquietudes y que sabía de mis temores por
las limitaciones en el país sobre el particular.
Agrega: “mi mayor suerte fue haber sido
recibida por el propio Rector Aybar Sánchez, quien al verme llegar,
personalmente procedió con el personal de admisiones para que fuera
matriculada; desde entonces mi vida cambió y estimulo a los demás
discapacitados de que, si se puede”.
“Me siento agradecida, porque se trata
de la única universidad que nos otorgó el privilegio de demostrarle a la
sociedad y al mundo que nosotros, las personas con cualquier tipo de
discapacidad física, podemos demostrar que se puede salir adelante, que se
puede caminar sin piernas, que se puede ver sin tener visión, que se puede
alcanzar todos los objetivos y metas que uno desee y ella (UNICARIBE) fue la
única que otorgó eso”, manifestó.
Jhoelly Claribel Roa Suero, estudiante
de Informática, quien se traslada desde Baní (región suroeste del país), es
sordo-muda y cursa el primer año de su carrera. Expresa que al concluir sus
estudios aspira obtener un trabajo y así ayudar a su familia, también manifestó
sentir un profundo agradecimiento por el servicio humanitario y apoyo que
recibe de la Universidad del Caribe.
Harold Zances, cursa la carrera de
Relaciones Internacionales, vive en la Romana (región este) su condición física
reflejada en su extremidad superior brazo derecho, no representa inconveniente
alguno para su proceso enseñanza-aprendizaje y para su participación, en
diferentes eventos, nacionales e internacionales; ha representado el país en
los Modelos de las Naciones Unidas y en el Modelo Dominicano NYDRMUN en Nueva
York.
Estudiar en UNICARIBE significa un nuevo
desafío y espera destacarse en el área diplomática, agradece el trato humano
que recibe de los docentes y del personal de la casa de altos estudios.
Odalís
Cuevas Ramírez, no vidente, estudia Derecho y vive en
el sector de Herrera de Santo Domingo
Oeste, labora en la Junta Central Electoral. Al terminar sus estudios
continuará especializándose en materia judicial, manifestó que sin la mano
amiga de UNICARIBE no hubiera podido concluir su pensum, ya que actualmente
cursa su último cuatrimestre y afirma sentirse capacitado para desempeñarse en
el ámbito judicial.
Julio César Adames, estudiante de
contabilidad y es de la provincia de Elías Piña (suroeste del país). Exhorta a
las personas que tienen posibilidades a emular el ejemplo de UNICARIBE: “Esta
universidad no se equivocó cuando tomó como slogan “La oportunidad que tú
esperabas”, si no fuera porque estoy becado yo no hubiese podido terminar el
pénsum de la carrera de Contabilidad”.
Oportunidad
de trabajo
Satisface a las autoridades de esta casa
de altos estudios haber incorporado a un no vidente a su cuerpo docente, se
trata del abogado Roberto Carlos Quiroz, quien tiene maestría en Derecho
Laboral y especialidad en Derecho Procesal Penal.
Este expresó que tocó muchas puertas a
todos los niveles en busca de trabajo y que al llegar a UNICARIBE las cosas
fueron diferentes. Entregó su currículum y desde hace más de dos años labora
sin mayores inconvenientes, las asignaturas que imparte son: Derecho Procesal
Penal I y II, Derecho Penal del I al IV y Práctica Forense I y II.
Quiroz destacó: “en nuestro país se
dispone de muchas personas con discapacidad con buenas competencias y con una
actitud muy positiva frente a la vida, con la mejor intención de producir,
trabajar y aportar a nuestro país”. También “exhortó a las instituciones del
país, públicas y privadas, a que tomen el ejemplo de UNICARIBE y que abran sus
puertas a los discapacitados, personas en condiciones especiales que pueden
demostrar que no hay diferencias cuando se tiene la misma oportunidad”.
La Universidad del Caribe se siente
altamente satisfecha por el servicio que ofrece a personas en condiciones
especiales (discapacitados), esto no sólo constituye un ejemplo de voluntad
esfuerzo y perseverancia, sino que subraya el concepto de que: “No es la
discapacidad lo que hace difícil la vida, sino los pensamientos y acciones de
los demás”.