Por
José Vicente Calderón R.*
Santo Domingo Oeste.-
En la edición del periódico, El Caribe, del viernes 15 de marzo de 2013, en su
interesantísima página 2, en “Dan de qué hablar”, aparece un breve comentario
intitulado: “La Barrick, in fraganti”, el cual saludo, celebro y felicito muy
efusivamente, y considero bien vale repetir aquí:
“La
Barrick, in fraganti. ¿Cómo es eso, que una organización del primer mundo, como
la Barrick Gold, ética, al más alto estilo de los ciudadanos de los países del
Norte, aquellos señores ejemplares, paradigmas de comportamiento ciudadano y
corporativo, cómo es que están violando las leyes de un pequeño país bananero?
¡Cómo puede ser! Esa empresa, que respeta todas las normas medioambientales,
que protege la salud de sus trabajadores, que ha cambiado el entorno de las
zonas cercanas a sus instalaciones, que ha transformado la vida de todos los
pueblos a su alrededor recurra a procedimientos ilegales. ¡No! Imposible, ¿La
Barrick Gold, sorprendida in fraganti tratando de sacar, de meter, gato por
liebre? ¿Prepotencia, soberbia o violación flagrante de las leyes 146-00 y
34-89?”.
No
más palabras, señor magistrado...
*José
Vicente Calderón R., periodista.