Por Lic. Luisa
Then
Santo
Domingo.- La realidad nos demuestra que las mujeres tenemos
la responsabilidad de un trabajo, las tareas en casa, el cuidado de los niños,
apoyar en sus tareas escolares, el cuidado de algún familiar enfermo; lo que no
nos deja tiempo y energía para continuar con otras actividades adicionales que
beneficien nuestro crecimiento personal como los estudios o capacitación en
alguna actividad productiva, realizar trabajos a favor de la comunidad,
pertenecer a una organización social, o simplemente disfrutar de un café con
las amigas.
Si a esta
sobrecarga de tareas, que influye negativamente en nuestro desarrollo, le
agregamos la falta de conocimientos de nuestros derechos, el alto índice de
analfabetismo, falta de acceso al
crédito, a un trabajo digno, a un ingreso económico que nos permita mejorar la
calidad de vida y la de nuestras familias, el resultado es penoso.
La reforma al
Código Laboral busca empeorar esta situación a las mujeres, ya que aumentaría
la jornada de trabajo a 12 hora, ¿Y entonces? En qué momento haríamos las otras
obligaciones sin olvidar que el cuerpo necesita 8 horas de descanso.
A esto le
sumamos que estaría en contra del artículo 62 de nuestra Constitución y
acuerdos Internacionales, que aunque no han sido aprobados por el Congreso
deben ser tomados en cuenta.
En otro sentido,
nuestra Constitución expresa que no se debe cancelar a una mujer por estar
embarazada o los tres meses posteriores al parto.
Es deber del Estado
velar por sus ciudadanos y ciudadanas y si dejamos que esta reforma sea
aprobada pues significa que nuestro velador (el Estado) nos está desamparando y
dejándonos a la suerte.
Un caso
hipotético sería, que una mujer embarazada correría el riesgo de no tener
respaldo económico por parte del empleador, por lo tanto esa familia dependería
solo del esposo.
Es necesario que
el Estado salga en defensa de los empleados y, sobre todo, en defensa de la
mujer que es la más afectada con esta reforma.
Es prioritario
que las mujeres dispongan de tiempo para su capacitación y dedicación a su
familia, que desde el gobierno se sigan promoviendo políticas que favorezcan su
desarrollo personal y económico, oportunidades de generar actividades
productivas en condiciones de seguridad e higiene, con esto lograremos que
tengan una mejor situación económica.
Educación = mejor
economía.