Por Raúl Germán B.
@RaulGermanB
Manoguayabo.-
Un lunes 25 de julio, que por cierto será inolvidable, la sociedad dominicana
fue estremecida con la difusión de un video de dos personas teniendo relaciones
sexuales en una oficina.
Bueno, y ¿qué extraño puede tener eso,
si hasta en la Casa Blanca se han hecho cositas parecidas?, que un ciudadano,
acompañado por un ‘corillo’, mientras grababa, de forma hasta pervertida,
entonaba al son de los amantes furtivos y desconsiderados: “¡Wao, qué rico! ¡Eh,
mira!, ‘waki’, ‘tátiki’, ‘tátiki’, ‘tátiki’. ¡Wao, coño! ¡Ay, ‘wap’, wao, ¡oh, ‘shit, men’, mira!, ‘!oh, shit,
men!’. Gocen,
mis hijos, gocen, wao”. Y al mismo tiempo, había una tipa que decía: “Oye,
corre, ven a ver. Vengan a ver, mierda,
vengan a ver”.
Y lo grave de todo esto fue que se
identificó a varias personas como las presuntas protagonistas del ‘video del
año’, de las cuales una fue a los medios a desmentir, información que parece
veraz, ya que una fuente, en la Policía, me comunicó que no fue ella.
Y ¿qué pasará con la imagen persona y
moral de esta señora con esta difusión masiva de su foto por las redes, que
hasta su esposo ha sido víctima de los ‘memes’ más chistosos?, ¡oh!, que
quedará mal parada, disminuida, desacreditada y muy maltratada.
Digo esto, porque en la tendencia
#Bextro su foto se posteo cientos de veces, ante un aproximado, según fuentes
del social media Pavel De Camps, de más de 35 millones de personas en Twitter y
un millón 600 mil en Instagram. A esto sume más de 200 mil reproducciones del
video, en Facebook, miles de veces que fue compartido, entre otras cosas.
Ante una difusión tan grande, de tantos
millones de personas y tanta interacción, es casi imposible recoger esto y
cambiar esta realidad.
Yeni Berenice, la Fiscal del Distrito
Nacional, debe decirle a la sociedad quién es ese señor que grabó ese video y
quiénes fueron los que sindicaron a esta mujer como la protagonista del video
y, también, someterlos a la justicia, mediante la Ley 53-07, sobre Crímenes y
Delitos de Alta Tecnología.
Y no me vengan con el argumento de que
los protagonistas del video no someterán a nadie, porque son casados, aun así,
el Ministerio Público debe actuar, porque este hecho ya perturbó la paz de un
pueblo.