
Por La Redacción
Manoguayabo.- Entrar
a Cooperstown es un privilegio de una élite, sólo unos pocos lo logran y no son
simplemente los grandes jugadores, sino las claras leyendas, los que llegan en
ese primer año de elegibilidad.
De los ocho latinos en el Salón de la
Fama, sólo dos el puertorriqueño Roberto Clemente y el panameño Rod Carew-
lograron entrar tan pronto se hicieron elegibles para entrar al más tradicional
de los reci