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Por Raúl Germán B.
@RaulGermanB
Santo
Domingo.- Usar las redes sociales para tratar de dañar la
imagen y el buen nombre de una persona es el acto más ruin de todos.
¿En qué cabeza cabe que la señora Ligia
Amada Melo le va a negar una beca a alguien por su cabello crespo?, en la de
nadie.
Pero abren una sospechosa campañita por
Twitter, la cual convierten en tendencia para desprestigiar el trabajo tesonero
y útil para esta sociedad de la señora Ligia.
Miles y miles de jóvenes, de todas las
clases (sobre todo de escasos recursos), lugares, universidades, aspectos y
demás se han ido a estudiar al extranjero, becados por el Ministerio de
Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT).
Ningún otro incumbente puede exhibir la
hoja de trabajo al frente de esa dependencia y, sobre todo, con la pulcritud
con que se hacen esas evaluaciones y selecciones.
Nincky González aprovechó una coyuntura
para poner en tela de juicio el buen nombre de Ligia, solo atacado por los
enemigos de ella, del trabajo serio y del Partido de la Liberación Dominicana.
Por más odio que derramen por las redes,
en contra de Ligia, ninguno de sus detractores ha hecho más por la educación
superior y el país que Amada Melo.
Ojalá y que estemos vivos todos para ver
el final de todo esto, por cierto en época de cambio de gobierno y
funcionarios, que no es más que un ruido innecesario a una funcionaria modelo
en el Estado dominicano.
Nadie ha dicho que el dinero de su beca
no ha llegado a su destino o que se ha desaparecido; mucho menos alguna
auditoría ha puesto en cuestionamiento el trabajo de Ligia. ¿Esta es la paga
que se merece por colaborar con su país?, parece que sí.
