Por: Andrés Travieso
Andrés Travieso. |
Santo
Domingo Oeste.- Dime quiénes te dirigen y te diré cuáles
son tus límites.
En un lenguaje “albañilesco”, grieta es
una quiebra o rajadura en una pared o edificio producida por un fuerte temblor,
por defecto del material o por la filtración de agua en una de las paredes del
edificio.
Las grietas generan pánico e
incertidumbre en los habitantes del edificio agrietado. Encima de una pared
agrietada, ningún albañil se atrevería a realizar una nueva construcción.
El tiempo y la realidad, cuales
temblores justicieros, han movido los edificios (léase líderes) de Santo
Domingo Oeste, y de paso nos muestran sus grietas.
Sin necesidad de los espejuelos de
Nuria, Alicia o Cámara de Cuentas podemos ver en el liderato del nuevo Oeste
grietas como arrogancia, ambición sin límites, inmoralidad, politiquería sucia,
chantaje, indiferencia, desobediencia a las leyes… y corrupción.
Es de notoriedad pública el dicho de
Maxwell: “la gente no confía en líderes que se sabe que tienen grietas en sus
caracteres”.
Un líder agrietado es débil, no puede
sostener el peso de una visión. Es incapaz de trazar un programa de desarrollo
a 5 o 10 años. Y sin visión no hay vía para que nuestro municipio se empine en
el pináculo de la superación.
De nada vale que tengamos la poderosa
zona industrial de Herrera, si las grietas de los líderes políticos,
comunitarios (y hasta religiosos) les han incapacitado para sentarse a la mesa
del diálogo en una gran concertación municipal con la finalidad de producir una
agenda de desarrollo.
El arquitecto Marcos Barinas testifica:
“Santo Domingo Oeste es una demarcación con un potencial que se está
desaprovechando”. Ahora bien, vale preguntarnos, ¿existe un líder en Sto. Dgo.
Oeste libre de grietas que nos conduzca hacia el aprovechamiento de nuestro
potencial? o ¿hay en el nuevo Oeste una voz moral, capaz de convocarnos a una
concertación municipal donde participen los perredeístas, peledeístas, los
comunitarios, los católicos, los evangélicos, empresarios y la juventud, para
definir hacia dónde queremos arribar?
El desarrollo de Santo Domingo Oeste
será posible en la medida de que nuestros líderes sean capaces de renovarse,
reinventarse, eliminar las grietas morales…que al decir del poeta Mario
Benedetti: “la verdad es que grietas no faltan”.
Ciertamente hay muchas grietas, que quede claro que no queremos funcionarios mesiánicos, salvadores, capaces de resolverlo todo tan solo con la voluntad, la gente necesita de lideres que los escuchen, que los entienda y que de buena fe pongan manos a la obra para junto a los afectados resolver o al menos mitigar los males que nos afectan.
ResponderEliminaratt, Lic. Pedro N. Guzman
Pedro y Andrés son dos jóvenes del municipio que siempre aciertan con sus análisis...el país los está subutilizando, ustedes son dos cerebros magníficos.
ResponderEliminarRaúl Germán B.
@raulredaccion